El ministro Gustavo Leite, en declaraciones a la prensa, recordó que los propietarios del ingenio que funciona en Iturbe (Guairá), actuaron de mala fe y pretendieron engañar al Gobierno, ya que hablaron de activos suficientes para enfrentar una convocatoria de acreedores. Sin embargo, se descubrió posteriormente que esos activos ya habían sido entregados en fideicomiso a un banco.

“Acá lo que corresponde es que el Poder Judicial declare la fábrica en quiebra. Hay que decirles a los directivos de la azucarera que dejen de ‘patotear’ al Poder Judicial de Villarrica. Estamos podridos de sus chicanas”, señaló el secretario de Estado.

El Gobierno pidió a la justicia la declaración de quiebra del ingenio, con el objetivo de recuperar al menos parte de los G. 15.000 millones que otorgó a los agricultores para cubrir la deuda que la empresa tenía con ellos.

Los representantes de la firma son Roberto Codas Friedmann y Fernando Campos, entre otros. La azucarera hace dos años dejó de operar, situación que "ahogó" el ingreso económico de los cañicultores de Guairá.