La VoZ digital | Criminal negligencia de la ANDE expone a unas 20.000 personas a graves afecciones

2015-11-18 | 12:00

Ente ignoró advertencia de la Contraloría

Criminal negligencia de la ANDE expone a unas 20.000 personas a graves afecciones
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La negligencia de autoridades de la Ande al La negligencia de autoridades de la Ande al "pasar por alto" una observación de la Contraloría General de la República puso en peligro la salud de miles de habitantes con la explosión en San Lorenzo.
La Administración Nacional de Electricidad (ANDE) ignoró una advertencia de la Contraloría General de la República (CGR) en el 2013 sobre el peligroso método que implementa para el resguardo y almacenamiento de los transformadores averiados o en desuso, especialmente en el depósito de San Lorenzo, ya que estaban en la intemperie, en grave violación a la ley ambiental. Miles de esos aparatos, que generalmente contienen una sustancia altamente tóxica llamada PCB (Bifenilos Policlorados) o aceite "askarel”, se incendiaron en el predio de la subestática y especialistas creen que unas 20.000 personas se exponen a graves enfermedades a consecuencia de la contaminación del aire. El exministro de Salud, José Mayans, dijo que iniciaron las averiguaciones al respecto. Así refiere una investigación publicada en la Revista Zeta en su edición impresa de noviembre.

La negligencia criminal de la ANDE trascendió luego de de que parte de unos 18.000 transformadores resultaron incinerados en el siniestro ocurrido en la tarde del miércoles 14 de octubre pasado, en el predio de la subestática del barrio Larelty de San Lorenzo.
Varios especialistas señalaron que esos aparatos eléctricos generalmente contienen PCB o también llamado aceite “askarel”, un compuesto químico altamente tóxico para los seres vivos.
Estudios revelan que los PCBs pueden ingresar al cuerpo a través del contacto con la piel, por la inhalación de vapores o por la ingestión de los alimentos que contengan residuos del compuesto.
Esto generó y sigue generando una gran preocupación e incluso durante el incendio los bomberos recomendaron una evacuación masiva de pobladores de la zona, que finalmente se suspendió. Pero la inquietud y dudas permanecen.
La densa humareda emanada durante el incendio afectó a miles de personas que se encontraban en San Lorenzo y Ñemby, principalmente, teniendo en cuenta que en el momento el viento soplaba desde el sector norte, según especialistas.
Al respecto, el exministro de Salud, Dr. José Mayans, señaló a la prensa que se hace un interrogatorio a los pobladores de las zonas adyacentes al incendio, para determinar si eventualmente presentan síntomas. Añadió que las personas que estuvieron expuestas a la posible contaminación serán sometidas a un examen laboratorial “para la detección del PCB en la sangre y orina, para ver qué niveles tienen”.
Mayans reveló que ocupantes de unas 3.500 viviendas en el primer anillo serán sometidos al estudio, medida que después se extenderá. “Son aproximadamente 20.000 las personas a ser censadas”, advirtió el galeno.
El seguimiento a las posibles víctimas puede durar días, meses o incluso años, señaló. Esto afecta principalmente a los bomberos que intervinieron en el siniestro.

Ente ignoró advertencia de la Contraloría

La ANDE tenía pleno conocimiento del peligro que representaba la acumulación de los transformadores en la intemperie y en una zona extremadamente poblada. La Contraloría General de la República (CGR) reveló que en el 2013, en su informe final sobre “Auditoría a los Bienes Patrimoniales de la ANDE, ejercicio fiscal 2012”, realizó una clara exposición y posterior observación sobre el “inadecuado procedimiento sobre almacenamiento de los transformadores de distribución fuera de uso”.
En otra parte del informe señala que “...se detectó que varios transformadores de distribución se encontraban destapados, inclinados, desnivelados, e incluso invertidos, esto ha generado derrame del contenido de los transformadores”.
Luego de exhibir imágenes de la forma como estaban los transformadores en desuso o averiados, la CGR informó que “en la ANDE se tiene una gestión de pasivos cuyo único enfoque está en la venta externa de aquellos que se da de baja. A pesar de ser este un mecanismo válido para la eliminación de pasivos, no incluye otros aspectos de gestión de pasivos que, para el caso de la ANDE, son cruciales. Por ejemplo, la retención de transformadores con o sin aceite, y de tambores con aceite usado, como resultado de no tenerse identificado si contienen o no PCBs, es un pasivo crítico incluso si llegase a resultar que la presencia de PCBs es tan baja que no requiera intervención específica, ya que las fugas de aceite que se tienen están contaminando de manera evidente y muy significativa los suelos de la zona de almacenaje. Si en esta contaminación llegase a identificarse un contenido alto de PCBs, sería no sólo ambientalmente crítica, sino también extremadamente costosa de manejar para la Entidad”.
La CGR concluyó que “se ha constatado que el lugar utilizado para el resguardo de los transformadores fuera de uso, inactivos o averiados, no se encuentran en condiciones aptas, ya que los inmuebles e infraestructuras utilizados para el efecto no cuentan con las exigencias de seguridad mínimas requeridas para el almacenamiento de este tipo de artefactos o productos”.
Añadió que “se detectó que varios transformadores de distribución se encontraban destapados, inclinados, desnivelados e incluso invertidos, esto ha generado derrames del contenido de los transformadores, en inobservancia a lo establecido en el Artículo 1° de la Resolución N° 1402/11 de la Secretaría del Ambiente dependiente del Poder Ejecutivo ‘Por el cual se establecen protocolos para el tratamiento de Bifenilos Policlorados (PCB) en el marco de la implementación del convenio de Estocolmo en la República
del Paraguay’”.
Finalmente, la Contraloría recomendó que «los responsables de la entidad deberán dar estricto cumplimiento a las disposiciones legales relativas a las exigencias de seguridad mínimas en cuanto al resguardo o almacenamiento de los transformadores averiados, así como los procedimientos para la descontaminación, tratamiento y/o eliminación de equipos, aceites y/o materiales sólidos contaminados con PCB”, señala el documento.

Posibles efectos de la sustancia tóxica


- La liberación del aditivo con PCB o “askarel” contamina el suelo y el agua, no solo de un barrio sino de toda la zona, porque una de sus características es que se desliza con facilidad.
- El principal riesgo de la sustancia es cuando los transformadores explotan o se incendian, ya que de esa forma el PCB se transforma en un producto químico denominado Dioxina, cinco millones de veces más dañino que el cianuro y es cancerígeno.
- El PCB es considerado un “contaminante orgánico persistente”, es decir, que permanece en el medio ambiente por largos periodos (incluso 100 años).
- El “askarel” produce daños irreparables y progresivos a la salud de seres vivos al entrar en contacto con la piel y por su inhalación (humo), dice la nota de Zeta.

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Reproducción de una parte de la nota de Investigación publicada en la Revista Zeta en su edición impresa de noviembre.