La VoZ digital | Ejecución de paraguayos fue obra de narcos, desliza Policía uruguaya

2016-02-07 | 17:00

INVESTIGADORES DE MONTEVIDEO APUNTAN A LAS DROGAS

Ejecución de paraguayos fue obra de narcos, desliza Policía uruguaya
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El letrado de Capitán Bado, Agustín Quevedo Arce y su esposa Claudia Rosana Quevedo Camacho, también abogada. (Foto gentileza) El letrado de Capitán Bado, Agustín Quevedo Arce y su esposa Claudia Rosana Quevedo Camacho, también abogada. (Foto gentileza)
Autoridades de la Policía del Uruguay aseguraron que las sospechas de la ejecución de la pareja de paraguayos ocurrida la noche de este sábado en Montevideo apunta a una obra de la mafia del narcotráfico. Indicaron que las circunstancias que rodearon al ataque apuntan "necesariamente" hacia esa sospecha.

Claudia Rosana Quevedo Camacho, de 40 años y Agustín Quevedo Arce, de 45, fueron acribillados en un ataque que tiene en sello de la mafia, a juzgar por las características del hecho y porque los sicarios no robaron nada del vehículo de las vítimas.

Tanto Claudia Quevedo como su esposo, el abogado Agustín Quevedo Arce, viajaban en una camioneta junto a su hijo Lucas, de 7 años, cuando fueron emboscados y acribillados sobre la ruta Giannattasio de Montevideo, Uruguay.

Quevedo Arce acusó un total de 14 balazos, en tanto que su esposa recibió dos tiros. Los sicarios abrieron fuego contra el vehículo de la pareja, que luego fue a impactar contra una columna. Antes del choque, arrollaron a una adolescente de 16 años, quien murió. Para la Policía del Uruguay, el "ajuste de cuentas" es la hipótesis que va cobrando fuerza, teniendo en cuenta los detalles del ataque.

El subjefe de Policía de Canelones, Jhonny Diego, dijo a la radio Montecarlo de Montevideo que se sospecha que el asesinato esté relacionado con el narcotráfico por la “magnitud” del hecho, según publicó la agencia EFE.

El abogado es de Capitán Bado fue detenido en el Brasil en el año 2002, junto a otras siete personas con un cargamento de 235 kilos de marihuana. El letrado había sido capturado en el municipio de Criciúma, hacia el sur del estado de Santa Catarina.

Posteriormente obtuvo su libertad y regresó a la frontera donde habría reiniciado ciertas actividades ligadas al narcotráfico, de acuerdo con los datos.