La VoZ digital | La NASA envía una sonda a un asteroide que podría chocar contra la Tierra

2016-08-19 | 17:55

POSIBLE CHOQUE DE UN ASTEROIDE A LA TIERRA

La NASA envía una sonda a un asteroide que podría chocar contra la Tierra
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Imagen ilustrativa de la roca Bennu. Imagen ilustrativa de la roca Bennu.
El objetivo de la sonda, que se lanzará el 8 de septiembre, es llegar al asteroide y regresar con muestras. La roca Bennu, con una probabilidad de impacto del 0,037%, podría iluminar el origen de la vida en la Tierra

El asteroide Bennu, sin embargo, sí puede tener un impacto en el conocimiento humano sobre cómo se formaron los planetas, cómo empezó la vida en la Tierra y cómo de probable es que se originara también en otros lugares del Sistema Solar. La NASA lanzará el 8 de septiembre a las 19:05, hora local de cabo Cañaveral, la sonda OSIRIS-REx, con la misión de aterrizar en el asteroide, arrancar fragmentos y volver a casa.

“No hay que preocuparse en absoluto. La probabilidad acumulada de impacto es del 0,037%, y a finales del siglo XXII”, explica a Materia el jefe de la misión, Mike Donnelly, del Centro de vuelo espacial Goddard de la NASA. “Para entonces, los datos de OSIRIS-REx nos ayudarán a hacer mejores predicciones sobre la órbita de Bennu”, tranquiliza.

La misión no será la primera de ida y vuelta a un asteroide. La sonda japonesa Hayabusa aterrizó en el 2005 en el asteroide Itokawa. Regresó cinco años más tarde con muestras que demostraron que el origen de la mayoría de los meteoritos que caen a la Tierra son, precisamente, asteroides como Itokawa, rocosos de tipo S. En esta ocasión, la NASA espera recoger entre 60 y 2.000 gramos de Bennu para, idealmente, encontrar moléculas orgánicas, como aminoácidos, los ladrillos que pudieron originar la vida en la Tierra hace unos 4.000 millones de años.

La sonda OSIRIS-REx, de unas dos toneladas, llegará al asteroide Bennu en 2018. Los responsables de la misión decidirán el punto de toma de muestras tras mapear su superficie. El brazo robótico de la misión recogerá el material. Será una especie de cápsula del tiempo de los primeros momentos del Sistema Solar, que será analizada, si todo sale bien, a su vuelta a la Tierra en 2023.