La VoZ digital | Estudiante de Medicina dona riñón a su madre

2017-05-02 | 14:29

Donación

Estudiante de Medicina dona riñón a su madre
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Gentileza. Gentileza.
En el mes de la madre, las protagonistas del trasplante renal Nº 68 en adultos, realizado desde la reapertura del Programa de Trasplantes y Tejidos del Hospital de Clínicas, son una madre e hija, oriundas de la ciudad de Itauguá.

La estudiante A.J.G.R. de cuarto año de la carrera de Medicina y Cirugía, donó un riñón a su mamá, M.M.R.G. de 41 años, quien se encontraba con tratamiento de hemodiálisis desde mayo de 2015, exactamente hace un año.

Por su parte, el papá de la donante y esposo de la receptora, Rubén Aníbal Genes, expresó emocionado que está muy contento, “lo que hizo mi hija… No hay palabras para describirlo. Es una nueva vida para todos”, afirmó.

La Dra. Norma Arévalos, nefróloga que participó del procedimiento quirúrgico, dijo, “Ella (por la hija) desde la primera cita, desde la primera consulta ya se ofreció a donarle a su madre. Empezaron los estudios y ahora ella realmente le salva la vida a su mamá, porque ella ya se va a liberar de la hemodiálisis, va a salir de eso y que puedan tener una mejor calidad de vida”, mencionó.

El equipo interviniente siempre destaca la voluntad de los familiares de pacientes renales en hemodiálisis para animarse a donar de manera consciente uno de sus riñones, describiéndolo como un acto de amor y milagro de vida, cuyo fin es dar alivio a un ser querido. Instaron además a la ciudadanía a reflexionar sobre la donación de órganos de familiares con muerte encefálica o cerebral.

El Dr. Fernando Abarzúa, urólogo, mencionó que en esta ocasión, se trata de un trasplante de riñón.

Estoy en el grupo ablación del donante, desde que comenzó el programa, hemos tratado de incorporar una técnica nueva que es la técnica de laparoscópica asistida por la mano, que trae aparejado grandes beneficios, tanto para el donante como para el receptor, porque con esta técnica que es mínimamente invasiva, se reduce el tiempo quirúrgico con el donante, se reduce el tiempo que mantenemos al riñón sin sangre y eso después se traduce en una rápida recuperación de la función renal al colocar el nuevo riñón en el receptor”, explicó

En todo sentido, este procedimiento laparoscópico es beneficioso, ya que el paciente tendrá un post operatorio con mucho menos dolor, su reincorporación social será mucho más rápida -además- disminuye el tiempo en que el riñón queda sin sangre (fuera del cuerpo) y también se traduce en la rápida recuperación del riñón una vez implantado.