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“Me siento como una mierda”, expresa el Will Smith en el audiovisual. El actor dice que se ha puesto en contacto con el humorista Chris Rock para disculparse, pero que este no ha querido tener la conversación, por el momento. Smith le tiende la mano para hablar cuando se sienta preparado.

El origen del incidente lo ocasionó el chiste del presentador, Chris Rock, sobre la alopecia que sufre Jada Pinkett Smith. Este la comparó con la teniente O'Neil, de la película de Ridley Scott, por llevar la cabeza rapada. Según el actor de En busca de la felicidad, lo ocurrido esa noche "está borroso". En un principio, Will Smith acogió con risas la broma, pero acabó en una bofetada en directo ante millones de espectadores en cuanto vio a su esposa poner los ojos en blanco por la burla recibida.

En la grabación de las disculpas, que toma la forma de un cuestionario en el que se pregunta y responde a sí mismo, el intérprete de Soy leyenda aclara que su esposa, Jada Pinkett Smith, objeto del chiste que ocasionó el incidente, no le obligó a pegar al presentador: “Tomo mis propias decisiones”. Además, pide perdón a la madre de Chris Rock. Según reflexiona en el vídeo: "En aquel momento no me di cuenta de cuánta gente resultó herida por mi comportamiento ". Sus compañeros de profesión en la gala y su propia familia se suman a la lista de personas con las que Will Smith se ha disculpado.

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